El pasado 4 de Noviembre de 2016, los alumnos del Bachiller Internacional y miembros del club de lectura del IES Rosalía de Castro, tuvimos la oportunidad de entrevistar al autor John Lanchester debido a que ha sido premiado con el Premio Novela Europea Casino de Santiago por su novela Capital. Este título tiene un doble sentido: la acumulación de riqueza y los pecados capitales del Estado. Al escribirla, el autor quería resaltar los cambios que han sucedido en Londres y el problema de la inmigración. Para lograr este propósito, en la novela el mecanismo está montado para que el lector acompañe la evolución, por este motivo en la novela podemos distinguir tres elementos: el narrador, un conjunto de personajes y Pepys Road (la calle donde se desarrolla la historia) que también es un personaje.
La novela trata de una serie de vecinos, que a pesar de convivir en el mismo espacio, es como si vivieran en mundos paralelos, al igual que en la realidad. La historia tiene lugar en la calle Pepys Road que tiene una gran importancia. El autor quería buscar una zona donde vivieran personas totalmente diferentes que en realidad no son una comunidad, a pesar de vivir juntos en una misma calle. El nombre de la calle se debe a que John Lanchester quería rendir homenaje al célebre diarista Samuel Pepys.
Para crear a los personajes, Lanchester pasa por este proceso: primero se imagina los personajes, luego se imagina pasando tiempo con ellos y al final nos cuenta lo que hacen en su vida diaria. Con respecto a este tema, nos contó algo que me pareció bastante interesante: no te pueden gustar demasiado los personajes que creas porque si eso ocurre puede haber un exceso de sentimentalidad en la obra, lo cual no es bueno porque es como si obligara a los lectores a que ellos también les gustaran los personajes, por lo que tiene que alcanzarse un equilibrio. Dos elementos muy realistas son los familiares pakistaníes de la tienda y el albañil polaco, personas muy comunes en Londres.
El libro fue escrito cuando empezó una importante crisis financiera. Para escribir el libro tuvo que informarse y educarse sobre el tema de la finanzas. Al hacerlo, se dio cuenta de que el miedo y la avaricia son dos fuerzas capaces de mover el mundo, las cuales se ven exageradas en un momento de crisis. El autor quería captar en su libro, precisamente el momento justo antes de que estallara la burbuja.
La idea de escribir el libro le surgió en el 2005, principios del 2006, con la intención de escribir una novela sobre la situación por la que estaba pasando Londres. El autor se inspiró en autores del siglo XIX como por ejemplo Dickens. Para escribir el libro utilizó la ironía dramática que consiste en que el lector del libro sabe que está pasando algo pero los personajes que están dentro no lo saben. Algo curioso es que le llevó igual tiempo planificar como escribiría el libro que escribirlo. En cuanto al final del libro, no tenía la idea específica en mente de cómo terminaría el libro pero si el sentimiento que quería transmitir: que los personajes continúan y el tiempo sigue pasando (mantuvo un final abierto).
Por último, decir que fue una experiencia magnífica que nos sirvió para interpretar el libro desde otro enfoque y para analizarlo mejor, gracias a que John Lanchester fue muy claro y conciso con sus respuestas, intentó explicar lo que quería decir con ejemplos, lo cual nos sirvió para entenderlo mejor.
Celia Fernández Rial (1º BI)
El viernes 4 de noviembre, nuestra clase de 1ºBI y algunos compañeros de 2ºBI tuvimos la oportunidad de hacerle preguntas relacionadas con su obra premiada con el Premio Casino al escritor John Lanchester. Pero, ¿quién es John Lanchester?
John Henry Lanchester es un periodista y escritor británico nacido en 1962, en Hamburgo.
Su padre era banquero, por lo que se crió en Hong Kong, Calcuta, Rangún y Brunéi debido a sus numerosos viajes de negocios. De hecho, él mismo comentó en la entrevista realizada este viernes 4, que cuando alguien le pregunta de dónde es no está muy seguro de qué responder. Esta infancia le proporcionó una visión más cosmopolita y amplia del mundo, carácter que influyó notablemente en sus obras. Se educó en Oxford, donde estudió periodismo.
En su carrera periodística para The Observer, se ha dedicado desde las reseñas de libros hasta las necrológicas, pasando por periodista futbolístico y crítico gastronómico.
Escribió un total de cuatro novelas de ficción y otras cuatro de no ficción. Entre las cuatro primeras se encuentra Capital, la obra escogida por el club de lectura y para realizar la entrevista con el autor, ya que fue la ganadora del Premio Casino 2016. A continuación, procedemos a redactar una breve reseña de la obra basada en el coloquio del viernes.
Esta novela cuenta un total de diecisiete tramas, todas relacionadas con una calle que representa la sociedad capitalista londinense: Pepys Road. Se trata de un vecindario acomodado del sur de Londres. Ahí “convive” gente de diferentes culturas y estilos de vida. El autor comentó que a su parecer, hoy en día apenas convivimos con gente a la que vemos diariamente. Por ejemplo, casi no interactuamos con los obreros de nuestro propio hogar, porque en cierta manera nos sentimos en un nivel superior, tal y como se da a entender en la novela.
En este barrio, encontramos desde una entrañable anciana llamada Petunia, que pasa los días en la ventana viendo pasar las furgonetas de repartos, hasta una familia de emigrantes paquistaníes que posée una tienda en la calle. Pero la trama que yo consideré más, digamos, central, sería la de Roger. Roger Yount es un hombre que aspira a ganar más dinero y a tener dos mujeres. Al final del libro, tras muchas vueltas, Roger abandona Pepys Road (elemento que comentaré más adelante en cuanto hable de los personajes).
En cuanto al estilo, esta novela combina la narrativa moderna con el ensayo, estilo cultivado también por el autor. No sólo nos cuenta las historias que acontecen a lo largo de la novela, sino que también nos da ciertas explicaciones sobre la situación económica de Gran Bretaña. Ya en el prólogo, explica cómo Pepys Road pasó de ser un vecindario para familias jóvenes llenas de ilusiones a ser un vecindario de gente acomodada (o que ya poseía la casa) tras su revalorización en la crisis.
Algo que encontré curioso del libro, fue el título, ese elemento al que no solemos prestar demasiada atención. Una de las preguntas hechas en el coloquio hacía referencia al título, y preguntaba si era un título polisémico elegido a propósito o si era una simple coincidencia. Lanchester respondió que su intención era proponer la relación tan próxima entre la idea de ‘capital’ como ciudad importante y el ‘capital’ referente al mundo de las finanzas. Para ejemplificar un poco este concepto eligió las 3F que se dice que Londres posee: Fashion (moda), Fútbol y Finanzas, y cómo esta última juega un papel tan importante a la hora de concebir Londres como una ciudad tan importante.
Mi pregunta seleccionada para la entrevista hacía referencia a los personajes. Se trata de la siguiente: ¿es cada personaje individual o el conjunto de todos ellos forma un personaje colectivo? La razón de mi pregunta es que tantas historias interconectadas nos recuerdan a obras como La colmena, de Camilo José Cela, pues son numerosos personajes (cada uno con su propia trama) que acaban formando uno colectivo, que en este caso sería Pepys Road. Lanchester respondió que ambos, que precisamente uno de sus objetivos con este estilo era dar la sensación de que la calle Pepys Road era un personaje más. Es por esto que el hecho de que Roger abandone la calle sea algo más importante de lo que parece. No es tan sólo el final del libro y de la vida de Roger en Pepys Road, ya que una vez se muda, él sigue con su vida en otro lugar, al igual que el vecindario. El mismo Lanchester dijo que hay películas que terminan con la pantalla fundiéndose en negro y que hay otras películas en las que la cámara se aparta y deja de enfocar al personaje protagonista. El tipo de final que quería para Capital era el segundo, y así lo consiguió con este elemento.
Además, ya que Pepys Road representa Londres, y que el autor identifica Londres como una ciudad cosmopolita, interpretamos esta obra como una especie de crítica hacia esta sociedad capitalista y consumista en la que vivimos actualmente. Y en mi opinión, esta obra convierte al lector en un vecino más de Pepys Road, pues al leer la novela tenemos esa sensación de estar fisgando por una ventana de la calle como otro vecino introducido en esta telaraña de historias.
Por último, mi opinión personal. Esta obra me pareció bastante sorprendente por el hecho de mezclar la narrativa con el ensayo, por explicar la realidad con ficción. Ficción que al fin y al cabo es más real de lo que en un inicio pensamos, pues muchos personajes están inspirados en gente real, como explicó John Lanchester el viernes. Mencionó en concreto a la familia paquistaní dueña de la tienda, ya que en su barrio también hay una tiendecita de ese tipo. Me pareció una obra que engancha nada más empezar por lo que comenté anteriormente de que te hace sentir como un vecino más cotilleando por la ventana. Tan sólo encontré un “defecto”, y es que su lectura acaba haciéndose un tanto pesada. Tal vez haya demasiadas historias juntas y yo eliminaría alguna, aunque en cierto modo es a la vez algo que le da un toque de personalidad a la obra.
Chelo Quintáns Badillo (1º BI)